Con la llegada del Día de la Madre este 11 de mayo, muchos colombianos se preparan para homenajear a las mujeres que han marcado sus vidas. Pero este año, un estudio revela que los regalos más deseados por las madres han cambiado de forma sorprendente.
La firma especializada en consumo Raddar realizó una encuesta que consultó no solo a quienes planean obsequiar, sino a las propias madres que recibirán los detalles. El resultado fue revelador: lo más anhelado no es un regalo físico, sino momentos compartidos con la familia.
Camilo Herrera, director de Raddar, explicó que el “tiempo de calidad en familia” ocupa el primer lugar en la lista de deseos, superando a regalos tradicionales como ropa, flores o cenas en restaurantes. Este hallazgo refleja una transformación profunda en las prioridades de las madres, muchas de las cuales deben equilibrar sus responsabilidades laborales con la vida familiar.
En una época donde la convivencia diaria se ve limitada por horarios laborales exigentes, distancias en las ciudades y el predominio de la tecnología como medio de comunicación, las madres sienten cada vez más la necesidad de reconectar con sus seres queridos. No es raro entonces que muchas de ellas pasen el día de la madre regaladas… pero solas.
Otro hallazgo significativo de la encuesta fue que un número considerable de madres desea, como obsequio, un mejor comportamiento por parte de sus hijos. En una era marcada por tensiones familiares y falta de tiempo compartido, este pedido refleja la necesidad de fortalecer los lazos afectivos más allá de lo material.
Aunque los obsequios físicos siguen teniendo su lugar —el 12,4 % mencionó desear un viaje, y el 9 % eligió flores como su regalo ideal—, ha crecido el número de madres que prefieren detalles simbólicos o gestos cargados de afecto. Las invitaciones a comer, serenatas y hasta artículos del hogar siguen en la lista, pero son cada vez menos los que encabezan las prioridades.
Este cambio de perspectiva invita a reflexionar: quizás el mejor regalo para mamá no se compra en una tienda, sino que se construye con presencia, cariño y atención sincera.