El gobierno del presidente Gustavo Petro estudia un posible incremento en la retención en la fuente, una medida que ha encendido alarmas entre analistas económicos y empresarios, quienes advierten que podría afectar directamente a la clase media, a los pequeños negocios y al empleo formal.
Entre las voces que se han pronunciado está la del excontralor general, Felipe Córdoba, quien expresó su preocupación en redes sociales: “¡Los colombianos no soportan una carga fiscal más! El Gobierno Nacional debe entender que la empresa privada no es el enemigo”, escribió. Según Córdoba, aumentar la retención reduciría la capacidad de ahorro, el consumo y podría incrementar los precios y la informalidad, que ya supera el 60% en el país, según las últimas cifras.
Córdoba, abogado y exfuncionario público, propone una ruta alternativa enfocada en el crecimiento económico a través del impulso de sectores clave como el minero, agrícola y de la construcción. A su juicio, estos sectores tienen potencial para generar empleo formal y nuevos ingresos tributarios sin necesidad de seguir aumentando la presión fiscal sobre quienes ya cumplen con sus obligaciones.
El debate surge en un contexto de desaceleración económica e incertidumbre en materia de inversión. Mientras desde el Gobierno se insiste en la necesidad de fortalecer el recaudo, expertos señalan que hacerlo a costa del bolsillo de los formales podría agravar los problemas estructurales en vez de resolverlos.
La discusión está sobre la mesa. Lo que está en juego no es solo una cifra en el recaudo, sino el impacto real en millones de colombianos que ya enfrentan dificultades económicas. Para muchos, la clave no está en cobrar más, sino en gastar mejor y fomentar un entorno que impulse la producción, el empleo y la formalización.
